CATALUÑA: ESTE NUEVO ESTADO SERIA….

El otro día tuve la suerte de sentarme entre dos catedráticos de economía y un muy alto cargo de una conocida banca de fuera de España y entre otras cosas, disfrute de una tertulia informal, pero rigurosa y enriquecedora, sobre la realidad de una Cataluña independiente.

Los cuatro estuvimos de acuerdo en que el resultado de las elecciones del día 25, tendrán una u otra reacción del Sr. (¿?) Mas y los Pujols dependiendo de la verdad sobre los casos que amenazan sus cabezas, como son los casos “Campeón, Pallerols y Pretoria”.  Si como parece por las escuchas, fueran ciertos (mi opinión es un sí rotundo) los indicios, entonces la independencia está servida, pues solo con una Cataluña independiente obtendrían la inmunidad. Pero recuerden los ciudadanos que esta independencia, no sería tanto por vocación, como por la búsqueda de la inmunidad.

¿Pero como seria de viable esta Cataluña como nuevo estado?

Solo espero que  analicen y piensen con la cabeza en vez de con el corazón, pues de ello dependerá su futuro, el de sus hijos y seres queridos.

EL EXPOLIO:

En 2007 Cataluña alcanzo una renta per cápita de un 120%, de la media de UE, superior a la de la Alemania, que se situaba en el 116% de la media de la UE y a la de la Italia con un 105% de la media de la UE en este año.         Esta situación de Cataluña en cuanto a la renta, es la consecuencia de que el crecimiento durante los últimos 30 años (1978-2008), ha sido uno de los más rápidos del mundo, superior del registrado en dicho periodo en cualquier país  de la OCDE. Pregunta: ¿Cómo es posible que una región expoliada cada año, a razón de un 8% de su PIB anual según los independentistas, haya crecido más intensamente que cualquier país o región del mundo, superando países que la renta per cápita eran en 1980, mucho más ricos que Cataluña?

CONSECUENCIAS SOBRE NIVEL DE RENTA CON LA SECESION:

Lo primero que cualquiera estará de acuerdo, es en el desvió del comercio y de inversión que ocasionaría la secesión. Es fácil entender que tal desvió en la parte comercial, estaría causada por el efecto frontera y las inevitables  represalias que resultarían de la creación de un nuevo Estado dentro de España. También tendría consecuencias negativas, la salida de flujos comerciales y de capitales por la salida de Cataluña de la UE. Las exportaciones catalanas se reducirían considerablemente, porque España y demás países de la UE comprarían menos y porque parte de las multinacionales que exportan desde Cataluña, abandonarían el nuevo país.

Cataluña estaría fuera de la UE, por un periodo indefinido, aunque siendo muy positivo, lo seguro que sería muy dilatado este periodo. No olvidemos que incluso en la hipotética posibilidad de que la secesión fuera amistosa y consentida, sería igualmente muy dilatada la permanencia de Cataluña fuera de la UE, pues no olvidemos que Francia, Portugal, Italia y Alemania se opondrían a su ingreso en la UE. Los tres primeros países se opondrían por el fácil motivo de desalentar cualquier tentación de independencia de algunas de sus regiones y Alemania porque una Cataluña sin España y viceversa les sería mucho más difícil de cumplir sus compromisos de deuda exterior con sus acreedores de los cuales Alemania es el más importante.

COSTE DE LA SECESION:

Después de analizado lo anterior, debemos decir que el coste de la secesión seria alrededor del 20% del PIB actual de Cataluña. Siendo estos unos costos terribles para Cataluña, lo peor seria las consecuencias de la salida de la UE, tanto si Cataluña adoptara por una moneda propia, como si intenta seguir utilizando el euro. Los propios independentistas reconocen que la creación de una moneda propia sería un desastre. Con el anuncio de la salida del euro y la adopción de una nueva moneda produciría fuerte salida de capitales y por ello una fuerte devaluación frente al euro y demás monedas de reserva. Piensen que Cataluña debería importar la mayor parte de sus bienes y servicios de consumo, la devaluación provocaría un intenso aumento de precios. Nada exagerado es pensar que el aumento inducido del PIB y la devaluación se situarían en un 50%. Esto provocaría descontentos entre la sociedad catalana y con ello demandas de subidas de pensiones, salarios y demás rentas para mantener el nivel adquisitivo. El servicio de la deuda de las familias, empresas y administraciones públicas se duplicaría en la moneda local debido a las devaluaciones. La economía estaría instalada en la constante inflación, pensiones devaluadas y salidas de capital que se realimentaría a sí misma. Todo ello provocaría la hiperinflación, pues el Banco Central difícilmente resistiría las presiones salariales alcistas y sobre todo del Gobierno para financiar mediante inflación, tanto los vencimientos de su deuda como el déficit presupuestario. ¿Significado de todo ello? Pues que la inflación no solo no mejoraría la competitividad exterior, sino que la deterioraría, pues el diferencial de inflación entre Cataluña y el resto del mundo sería mayor que la devaluación nominal. Por todo ello los independentistas son partidarios de seguir utilizando el euro. Son varios los países que así actúan y todos ellos tienen tres características en común: 1ª su reducido o irrelevante tamaño económico. 2º una renta per cápita muy inferior a la media europea. 3º buscan restaurar la credibilidad que perdieron o que nunca tuvieron.

¿Existen posibilidades de que una Cataluña independiente pueda utilizar únicamente el euro? ……Casi imposible!.......¿porque?...........los bancos!!!

LOS BANCOS DE LA CATALUÑA INDEPENDIENTE:

En una Cataluña independiente, en una Cataluña apartada de la UE y de la Eurozona, los bancos catalanes pasarían a ser bancos extranjeros (españoles) ya que sería la única forma de seguir en el eurosistema y por ello seguirían teniendo acceso a las líneas de liquidez y descuento del sistema europeo de bancos centrales y del BCE. La deuda pública en Cataluña no podría ser descontada en el BCE, aunque estuviera denominada en euros, con lo cual estas y otras entidades españolas y del resto de la Eurozona, intentarían vender sus tenencias de dicha deuda y no comprarían nuevas emisiones. El nuevo Estado catalán no tendría acceso a los recursos de las facilidades europeas. No olvidemos que al día de hoy, Cataluña tiene catalogada sus emisiones como deuda basura y por ello en la actualidad, su único proveedor de dinero actualmente proviene de España y del crédito a España.

Por ello debemos considerar lo siguiente: 1º El déficit público del nuevo Estado seria considerable por la pérdida de ingresos públicos provocada por la deslocalización de empresas financieras y no financieras y por la caída de rentas por causa de la interrupción y desviación de los flujos comerciales. 2º gran parte de la demanda de deuda pública catalana está concentrada en el sector financiero español (recuerden que los bancos catalanes serian españoles), la financiación del déficit y de los vencimientos de la deuda pública que se fueran produciendo serian imposible. Estas dificultades multiplicarían la salida de capitales y acelerarían la caída de la actividad económica, con lo que complicarían todavía más la gestión de finanzas públicas.

En 2012, las dudas sobre la calidad de la deuda pública y privada española, sobre la permanencia  de España en el euro y las dudas causadas por los movimientos secesionistas, han impulsado salidas masivas de capital, que rondaría el 20% del PIB en el conjunto del año. España ha podido financiar esas salidas de capitales y el déficit de la cuenta corriente de la balanza de pagos de casi un 2% del PIB, sin salir del euro, gracias a la acumulación  de una posición deudora neta del eurosistema. Con Cataluña fuera del eurosistema, si desea utilizar el euro, deberá hacer frente a cualquier salida de capitales generando un superávit de la balanza de pagos por cuenta corriente de la misma magnitud. Esto provocaría unas caídas de la renta muy superiores de las calculadas por los secesionistas, que ellos han calculado ignorando los factores financieros. Por todo ello el nuevo Estado le llevaría más tarde o más temprano  a crear un Banco Central y una nueva moneda para financiar mediante el impuesto inflacionista la Cataluña independiente. Con moneda propia o con el euro, las consecuencias serían igualmente catastróficas, para quienes integrarían el nuevo Estado.   

Solo queda advertir a los catalanes que la Cataluña independiente, sometería  al nuevo país a tres golpes muy fuertes: 1º El golpe provocado por la salida de un país con el que ha compartido instituciones y mercados durante siglos. 2º la salida de Cataluña del área económica y política de la UE. 3º Como consecuencia del 2º, su salida de la Eurozona.

Dicen los independentistas que sería transitorio y es verdad, pues nada es eterno, pero las cuatro o cinco generaciones que lo van a sufrir, se les debería decir y hacer saber la verdad antes de lanzar al vacío a toda una sociedad.

Personalmente el problema real es que los que buscan la independencia, no saben lo que hacen, porque no saben lo que deshacen.

Pero tal vez, solo tal vez, después de tantos años de mentiras, engaños, manipulaciones y las actitudes tan parecidas al nazismo, sea buena la independencia, pues soy muy consciente de que ella solo superaría como mucho un año, pues sería la sociedad, esta sociedad ciega y tan carente de razonamiento, la primera en lanzarse a recuperar su lugar perdido y su identidad verdadera.